Sigue tu Ethos

Persigue tus sueños y llegarás lejos ~



Ensayo "Ética para Amador" Jean Pierre Contreras

22.04.2014 20:29

Introducción:

En lo que respeta a la ética y a su estudio la mayoría de la gente tiene el prejuicio,  de que esta es una disciplina compleja y que además de ello se presenta de manera demasiado complicada en textos antaño, es por esto que ya antes de comenzar a leer ya estamos con una disposición negativa. Es por eso que es tan mencionable el logro que logro F. Savater pues nos redactó de manera clara y amigable de leer (tomando en cuenta que lo escribió pensando que el público objetivo era su propio hijo) una pieza de ética que no por estar escrita de forma más amigable deja de tener un análisis profundo delas cuestiones que a la ética le competen. Los conceptos claves en los que se puede resumir esta pieza son: la libertad, y la buena vida, así a través de estos términos Savater nos intenta dar una guía de cómo se debe descubrir y establecer nuestra libertad (hablando de la correcta libertad, no de un simple hacer lo que se me da la gana o un vago “porque si”) , y a su vez nos muestra cómo debe de ser la buena vida conforme a la moral y a tomar nuestras correctas decisiones, se resumir es vivir una vida sin prejuicios, ordenes o caprichos, tomar lo que queremos porque nos es bueno para nuestra vida y para la sociedad. De esta manera Savater nos intenta mostrar cómo se debe de llevar una buena vida y cuáles son los conceptos que debe conocer una persona, y no ocupando la palabra conocer como un conocimiento superficial sobre, sino más bien de reeducar lo que entendemos por libertad y por lo que es bueno, pues eso es lo que nos compete, el buen vivir.

 

 

 

Síntesis:

El libro de Savater está escrito como una seguidilla de conceptos, de esta forma sintetizar el texto se nos es más simple siguiendo su mismo orden. El libro comienza con la reflexión de que es lo que nos conviene, o se nos es grato y así mismo sobre lo que no nos conviene tanto, de aquí aparecen los términos de lo que “nos conviene solemos llamarlo bueno porque nos sienta bien, y en cambio otras cosas nos sientan muy mal y a todo eso lo llamamos malo”. Aquí aparece la discusión del ¿por qué? Si todos buscamos lo que nos sienta bien cómo es posible que todos vivamos vidas con elecciones diferentes, siendo que todos buscamos lo que nos es bueno, aquí llegamos al punto de que lo único de lo que estamos de acuerdo, es de que no concordamos con todo el mundo. Entonces siendo que tenemos la capacidad de elegir lo que se nos es bueno, significa que somos libres de nuestras decisiones, por lo tanto poseemos la maldición de la libertad (maldición pues es muchísimos más sencillo no ser libre y depender de un tercero), no estamos programados elegimos nuestra propia ética o arte de vivir. Existen factores además que alteran lo que creemos es una elección libre los caprichos (hacer lo que se me da la gana por que sí), las ordenes (depender de un tercero imperante en nuestras decisiones) o costumbres (realizar las cosas porque lo hago todos los días, o porque todo el mundo lo hace), para esos tres problemas aparece la inminente solución de “aprender a elegir por nosotros mismos”, hay que ser capaz de inventar la vida propia, y no de vivir lo que han inventado para uno, es decir haz lo que quieres solo rígete por lo que tú crees correcto. Este haz lo que quieras viene acompañado de una inmensa responsabilidad, la de hacerse responsable de nuestras decisiones, pues estas ya no dependen de ningún otro, entonces además de hacer lo que quieras debes tomar en cuenta a los otros, pues la vida de un ser humano se conforma en una sociedad, un ser humano en la soledad deja de ser humanizado, y por lo tanto pierde esta propiedad. Dado esto debemos llevar una buena vida, y además no ser imbéciles y poder aportar un poco a la vida de los otros, pues no sacamos nada con beneficiarnos a nosotros mismos, si vivimos en una sociedad, por lo que lo que afecta a otro nos repercute también a nosotros. Entonces antes de tomar una decisión debemos tomar en cuenta lo que le percute al resto, eso no quiere decir no hacer lo que queramos, sino más bien tomar conciencia de nuestra libertad y el grado de responsabilidad que a ella le compete, pues solo es realmente libre el que puede decidir lo correcto sin ningún remordimiento de él o del mundo.

 

Análisis desde la perspectiva individual

Ahora pasemos a la parte que compete a mi persona en todo esto, el texto en general yo lo resumo en la frase de “la guía para el buen vivir”, así de sencillo y sin complicaciones, tratando de apropiarme de cada verso escrito,  pues en unas cuantas paginas nos describe como conocer de lo que es bueno o dicho con sus palabras lo que  nos conviene y lo que es malo, pues acaso nos cuestionamos alguna vez la complejidad de estas decisiones , pues nos hemos dado cuenta que cosas que parecen buenas para nosotros para otros son malas o desagradables, ¿entonces verdaderamente lo que estamos haciendo es bueno?, o en verdad que a veces tomamos más decisiones por egoísmo que por bondad, entonces significa que en mi libertad prefiero ciertamente lo que se me es más fácil, pues no debe de ser así los caminos más fáciles son a veces los que más perjudican a los otros y a su vez nuestra vida se convierte en una serie se decisiones sin sentidos, pues nos da igual. Entonces debemos seguir el camino más complicado, pues este nos lleva a tomar mejores decisiones, no debemos de nuca guiarnos por órdenes de alguien, pues por que las decisiones de otro van a ser mejores que las propias, acaso no han existido en el transcurso de la historia múltiples tiranos y dictadores que le han realizado incontable atrocidades a la humanidad, por que debería de obedecer a alguien que me obliga a realizar algo que yo no haría por mi cuenta. Ni de hablar sobre las costumbres, acaso no hay múltiples etnias que sacrifican gente, que profanan a los muertos, que nos discriminan por nuestro color de piel y que nos colgarían por el solo hecho de profesar una religión diferente a la de ellos. Y ni hablar de los caprichos, acaso debemos de consentir a aquellos que solo por el gusto de hacer “lo que les da la gana” asesinan a sus familiares por una riña por algún bien que sienten les pertenece más a ellos, o por alguna infidelidad (sin avalar esta práctica),  o quienes mutilan a un pequeño animal solo para causar las risotadas de sus pares,  porque los caprichos deben ser avalados por nosotros, si no estás entre nuestras normas morales. Son nuestras propias decisiones las que deben tomar y estas han de ser las correctas.

Todos sin dejar a nadie de lado somos dueños de nuestra libertad, aunque nuestros contextos sociales nos dejen limitadas opciones, nosotros somos los que tenemos la libertad de pensar todo dos veces y en ese entonces cuestionarnos el por qué hacemos algo, cual sería sino el sentido de vivir la vida si no nos detenemos a pensar en las decisiones que estamos tomando, serie una eterna espera hacia nuestro fin, no tiene entonces más sentido tomar nuestras decisiones a “conciencia” y tomar en cuenta que aun siendo cada persona diferente , por ende poseyente de diferentes pensamientos, no por eso dejando de lado de que compartimos el hecho de ser “humano” y todo ser humano debe buscar ser un ser social. No sería más fácil que siendo seres sociales todos tomemos nuestras decisiones tomando en cuenta de cómo estas nos van a afectar a cada uno de nosotros, me explico, si vas a tomar una decisión por ejemplo en la situación: “… estas en un almacén comprando algo para el almuerzo y un señor que está a tu lado luego de terminar su compra se va sin percatarse que su cambio aún estaba en dicho almacén, si nosotros tomáramos ese dinero quizás nos serviría y nos haría de cierta manera un bien, en cambio sí lo tomáramos y alcanzáramos a la persona antes de que se aleje para devolverle su dinero, ese bien seria para él , pues quizás ese dinero tenía otra utilidad y aun no siendo así sigue siendo de su pertenencia. Ahora tomemos el ejemplo del primer caso en el cual nosotros nos quedamos con el cambio, pero hay un cambio en la historia ahora nosotros somos el olvidadizo cliente, entonces que desearíamos que también nos lo devolvieran a nosotros, entonces no debemos ponernos en el lugar del otro, y entonces así podríamos conseguir que quizás cuando nos suceda a nosotros hay otro alguien que lo pensó dos veces y nos devolvió la suma que dejamos en el almacén…”. Este es mi ejemplo una utopía al estilo de “Un mundo feliz” pero sin sus argumentos que dejan mucho que desear, sino un mundo en el cual nuestra conciencia social colectiva nos lleve a que cada uno de nosotros piense y se ponga en el lugar del otro, pues para disfrutar nuestra vida solo es necesario de nuestra libertad, y eso ya lo poseemos desde antaño, entonces si nosotros disfrutamos nuestra vida porque no es así de fácil que los otros disfruten la suya, pues para esto es solo necesario una pequeña pisca de ayuda, solo es necesario que aceptemos que somos seres humanos y sociales y que por ende tenemos una responsabilidad social y humanitaria a que esta sociedad funcione correctamente.

Conclusión

Podríamos decir que lo que compete a la ética y a la moral es más que en decisiones aisladas en las cuales pareciera que es su único campo (de mayor manera aun en el caso de un terapeuta, pues debemos hacernos cargo de nuestra libertad, ponernos en los zapatos de los pacientes y decidir lo que a ambos nos es bueno) si no es más que eso, sino más bien es una esfera de nuestro propio pensamiento en la cual existen toda la gama de decisiones posibles y solo nosotros en nuestra propia e innegable libertad podemos decidir en qué esfera de pensamiento nos quedamos, acaso no un terapeuta debiese de tener formado un correcto ser social, si no es así como este podría de decidir en torno a un paciente si no nos ponemos en el lugar de este  esto sin dejar de lado en como nuestras decisiones competen a los que nos rodean, pues se es tan bueno como la más mezquina de nuestras acciones y dado que la moral es una índole de autorrealización no sería tonto de nuestra parte mentirnos a nosotros mismos, si vamos a tomar una decisión debemos de dejar de intentar a echarle la culpa a otros sobre nuestras decisiones, sino que decidir por nuestra propia cuenta como en la vida que queremos llevar, que ya no importe nuestro grupo social con su impacto y presión que ejercen sobre nosotros, aislar a aquellos que creen que tienes algún derecho sobre nuestras propias decisiones, que son los tiranos frente a un mundo de conceptos bien fundados, en ese momento pasan a ser solo unos dementes que creen que con sus órdenes y palabras puedes de cambiar nuestros intereses, tomemos nuestros caprichos y transformémosles en decisiones asertivas y así en nuestra humilde y única libertad poder de seguir lo que yo denominare el arte del “buen vivir”.